El vino es una bebida que se obtiene de la uva mediante la
fermentación alcohólica de su mosto, la fermentación se produce por la
acción metabólica de levaduras que transforman los azúcares de la uva en
alcohol etílico y gas en forma de dióxido de carbono.
El azúcar y los
ácidos que poseen las uvas hace que sean suficientes para el desarrollo
de la fermentación. No obstante, el vino es la suma de un grupo de
factores ambientales tales como: el clima, la latitud, la altura, las
horas de luz, entre otras.
Un 66% aproximadamente de toda la recolección
de uvas del mundo se dedica a la producción vinícola, el 34 % restante
es utilizado para consumo como fruta. Aunque el cultivo de la vid sólo
cubra un 0.5% del suelo cultivable en el mundo. El cultivo de la vid se
ha asociado a lugares con un clima mediterráneo.
Por lo tanto el nombre de "vino" se da solamente al líquido que
resulta de la fermentación alcohólica del jugo de las uvas, sin añadir
ninguna otra sustancia. En muchas legislaciones se considera sólo como
vino a la bebida fermentada obtenida, pese a que se obtienen bebidas
semejantes de otras variedades como la labrusca, rupestris, etc.
La cienca que estudia el conocimiento de la elaboración del vino se denomina
enología (sin
tener en cuenta los procesos de cultivo de la vid). La ciencia que
estudia solamente la biología de la vid y su cultivo se denomina
ampelología.
No existe una norma absoluta para clasificar los diferentes tipos de
vinos que existen. Una forma practicada por instituciones como Le Cordon
Bleu, respeta la denominación utilizada en el Viejo Mundo (Europa y
Asia Menor, cuando se habla de vinos), que lista a los vinos según la
región de la que proceden.
El razonamiento para usar este sistema dice
que el clima y tipo de suelo donde la vid ha crecido, tienen la mayor
contribución al carácter de la bebida. Este sistema ha llegado a tener
legislaciones a nivel nacional en varios países, donde el término
"denominación de origen" (D.O. en España, A.O.C. en Francia, DOCG en
Italia, QmP en Alemania, D.O.C. en Portugal) garantiza la elaboración en
una zona geográfica con unos parámetros mínimos de calidad. Bajo el
sistema D.O., los tipos de uva empleados en un vino pasan a tener menor
importancia.
En el Nuevo Mundo se da preferencia a denominar los vinos según el
tipo de uva que se ha utilizado. En el contexto vinícola, "Nuevo Mundo"
significa todo lo que no es "Viejo Mundo", es decir, además de América,
son incluidos Australia, Nueva Zelanda y África del Sur.
La diferencia entre los dos tipos de clasificaciones radica en que el
Nuevo Mundo, al estar menos restringido por la tradición vinícola
Europea, ha preferido comercializar sus vinos como varietales.
Un vino
varietal es aquel elaborado con un sólo tipo de uva, o es una mezcla
donde hay un tipo de uva que predomina sobre los demás (de 75 a 90%,
depende del país). En cuanto a las variedades, Italia cuenta el mayor
numero de vid autóctonas.